¿Van a subir las tablas de surf? Biolos, Pyzel y Cox lo explican sin filtros

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Trump se ha sacado una jugada maestra (o bomba de humo, según cómo lo veas): nuevos aranceles generales del 10% a todas las importaciones, más tarifas específicas para países “malos”. Esto, claro, afecta a casi todos los productos… incluyendo nuestras queridas tablas de surf.

¿Qué significa esto para ti, que estás pensando en pillarte un twin fin o renovar ese epoxy que ya flexa de más? Pues que las tablas fabricadas fuera de EE.UU. —y eso incluye muchas de las tuyas favoritas— van a costar más. ¿Cuánto? No tanto como crees, pero sí lo suficiente como para cambiar cosas.

Biolos, Pyzel y Cox: tres cracks, tres enfoques

Para entender este lío tres de los principales jugadores del mercado se han pronuncioado Matt Biolos (Lost), Jon Pyzel (Pyzel) y Hayden Cox (Haydenshapes).

  • Biolos es un pionero en la defensa del shape local, luchando desde hace más de 20 años por aranceles justos.
  • Pyzel opera con ética: cero producción en Asia, B Corp certificada, y foco en la gente y la sostenibilidad.
  • Cox va full global: produce en fábricas de élite como Cobra en Tailandia, y cree en la eficiencia con estilo.

arancelas tablas de surf

Matt Biolos: “No es justo competir con tablas que entran como juguetes de piscina”

Biolos lleva dos décadas peleando para que las tablas tengan su propio código aduanero y no se las catalogue como “pool toys”. Gracias a él, hoy se puede saber cuántas tablas entran a EE.UU., de dónde vienen y a qué precio. “No estoy en contra de importar. Estoy a favor de un campo de juego justo”.

Con los nuevos aranceles, calcula que una tabla podría subir entre 10 y 20 dólares, dependiendo de si el blank o los plugs vienen de Asia. ¿Mucho? No. ¿Excusa para subir precios 40 pavos? “Eso ya es pasarse”, dice.

Jon Pyzel: ética, valores y producción local con cabeza

Pyzel apuesta por la producción nacional y por no seguir la ola de Asia. Trabaja con fábricas en Oceanside y Haleiwa, y deja que sus licensees fabriquen localmente en otras regiones. Dice que los márgenes están justos y que cualquier subida de costes se notará… pero que, aún así, intenta mantener su compromiso con proveedores como Arctic Foam, incluso si México queda en la diana de los aranceles.

Su B Corp no le hace vender más, pero al menos, asegura, le hace dormir tranquilo. “No somos la marca más ecológica. Pero tratamos bien a la gente, y eso ya es algo”.

Hayden Cox: producción global, precisión quirúrgica

Cox tiene claro que si quieres calidad, escala y consistencia, hay que mirar más allá del shaping bay romántico. Produce en Brasil, Sudáfrica y Cobra en Tailandia. Su fábrica australiana ardió en 2023 y eso fue el empujón para apostar por un modelo global aún más fuerte.

¿Le preocupan los aranceles? Sí, pero no por el precio de la tabla, sino por el impacto que puede tener en el ecosistema frágil del surf retail. “Las tiendas ya están en el límite. Si suben los costes y baja la demanda, muchas podrían desaparecer”.

cobra

¿Qué significa todo esto para ti?

  • 📈 Las tablas hechas en Asia subirán un poco de precio, pero no será el fin del mundo.
  • 🧾 Algunos usarán esto como excusa para subir precios más de la cuenta.
  • 🌊 Las marcas que fabrican en casa podrían beneficiarse, si la diferencia de precio se reduce.
  • 🔧 El verdadero riesgo está en la cadena de suministro: blanks, plugs, resinas, etc.

El surf es global. Pero producir tablas de calidad, de forma justa y sostenible, es cada vez más un arte de equilibrios. Biolos lo ve como una batalla justa. Pyzel como un compromiso personal. Y Cox como una necesidad de sistema.

Mientras tanto, tú solo quieres coger olas. Pero si puedes apoyar a una marca que lo está intentando hacer bien… pues mejor, ¿no?

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