Un sueño, un podio y un mensaje claro
Tras varias temporadas de altibajos, Kanoa Igarashi parece haber recuperado parte de esa chispa que lo llevó a lo más alto en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, donde ganó la medalla de plata. La pasada semana, el surfista japonés se coló en la final del Rip Curl Pro Bells Beach, una prueba que históricamente no le había sido favorable.
“Tuve un sueño anoche. Me desperté soñando que estaba tocando la campana… pero era un poco más pequeña,” bromeó Kanoa desde el podio, trofeo en mano. “Supongo que se hizo realidad… a medias.”
El análisis: ¿vuelve el mejor Kanoa?
Y es que el subcampeonato en Bells —un evento en el que nunca había pasado de la tercera ronda— tiene sabor a redención. Aunque aún es pronto para hablar de un regreso completo, los datos apuntan a una tendencia positiva. En 2024, Igarashi solo superó los octavos de final en una ocasión, en Sunset Beach, donde perdió en la final ante Jack Robinson. En cambio, este 2025 ya acumula actuaciones más sólidas, incluyendo una victoria sobre Ethan Ewing en Bells, uno de los nombres fuertes del circuito.
Lo que viene
La gran pregunta es: ¿estamos viendo el renacer competitivo de Kanoa Igarashi o solo un pico en su irregular curva de resultados? Con el Bonsoy Gold Coast Pro en curso, y más pruebas clave por delante, el surfista nipón tiene la oportunidad de consolidar su regreso al top competitivo. De momento, ha vuelto a llamar a la puerta, y no precisamente con una campana pequeña.
